Sin el alquiler, una familia tipo (dos adultos y dos hijos menores) debió haber tenido en febrero ingresos superiores a los $ 1.089.146 para no ser pobre y más de $ 1.713.065 para ser considerada de clase media, de acuerdo a los datos del Instituto de Estadística y Censos de Ciudad de Buenos Aires (CABA).
Entre esos dos valores, el Informe señala que se trata de sectores no pobres vulnerables y sectores medios frágiles.
Con el alquiler, esa misma familia (4 personas) con un mínimo de 3 ambientes tendría que haber recibido ingresos por encima de $ 1,8 millones mensuales en el caso de la pobreza y más de $ 2,5 millones para ser un hogar de clase media. Esas cifras varían en más o en menos, según la ubicación del inmueble en los distintos barrios porteños.
Es que el alquiler de un departamento usado de un ambiente (30 m2) promedió en el IV Trimestre de 2024 los $ 361.749. Dos ambientes (43 m2) ascendió a $ 492.805 y 3 ambientes (70 m2) $ 761.773, según el Instituto porteño, valores que a febrero 2025 deberían ser más altos.
Otros rubros que pesan en el gasto de clase media es la medicina prepaga, automóvil (seguro, garaje, combustible) y la cuota de los que están pagando un crédito hipotecario más las expensas, en el caso de los propietarios, todos rubros con incrementos muy por encima del promedio.
Por ejemplo, el rubro Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles registró un incremento interanual a febrero del 125,3%. En tanto Seguros y servicios financieros acumuló en un año un 153,4% versus una inflación promedio del 79,4%.
Por la desaceleración de los precios de los alimentos y la aceleración de los aumentos en los servicios públicos y privados, la canasta básica de la clase media viene aumentando más que la canasta de indigencia y de pobreza. Y eso fue determinando un achique de la proporción de la clase media en el total de la población porteña.
En febrero, con una inflación interanual promedio de 79,4%, los precios de los bienes registraron una suba de 47,5%, por debajo de los servicios, que aumentaron 107,2%.
“Los sectores medios asociados a la “clase media” representan la categoría de mayor magnitud: 49,5% de los hogares de la Ciudad de Buenos Aires y 46,1% de la población (unos 669.000 hogares y 1.422.000 personas, respectivamente)”, según el último informe del Instituto Porteño (III trimestre 2024), muy lejos del 57,4% (hogares) y 55.2% (personas) de igual período de 2017.
En tanto, los sectores vulnerables y “medio-frágil” aumentaron del 14,9% al 19,4% en iguales períodos de 2017 y 2024.
En promedio, a nivel nacional, la Remuneración Imponible de Trabajadores Estables (RIPTE) que se aproxima a un sueldo promedio formal fue de $ $ 1.234.658,40 en enero 2025.
Por su parte, según la Fundación Capital «el mejor desempeño del poder adquisitivo de los deciles más altos (familias de mayores ingresos), en conjunto con el fuerte crecimiento del crédito, estarían explicando el mayor dinamismo en el consumo de durables. En sentido contrario, la magra evolución de los ingresos en los sectores de menor poder adquisitivo, sumado a la recomposición de precios de servicios, limitó el consumo de productos cotidianos, de mayor peso en la canasta de las familias de menores ingresos (primeros deciles)»
SN