Después de haber subido 6% en lo que va de junio, el dólar blue metió una pausa y retrocedió 20 pesos. Así, este jueves se vende a $ 1.345 y sigue siendo el más caro entre los dólares alternativos.
El miércoles el blue llegó a tocar los $ 1.380, y finalmente cerró en $ 1.365. En un segmento de mercado con pocas operaciones, los operadores advertían que la cotización de $ 1.380 parecía excesiva ya que se ubicaba 40 pesos por encima del dólar contado con liqui, la vía por la que se dolarizan las empresas, y 50 pesos más caro que el MEP, el tipo de cambio al que los ahorristas pueden acceder a través de la bolsa porteña.
Ese gap entre el blue y los financieros parecía difícil de sostener. En esta rueda, el blue retrocede y el contado con liqui y el MEP suben 0,2%, para cotizar en $ 1.335 y $ 1.343, respectivamente. De este modo la diferencia de precios en las cotizaciones es exigua.
¿El blue tocó techo?
La pregunta que recorre la city porteña es si los $ 1.380 que el blue tocó ayer marcan un tope para el informal. Aunque no hay certezas, entre los operadores la percepción es que hay poco margen para que siga subiendo.
«Sigue habiendo escasos pesos disponibles para acaparar dólares. Y a estos valores no parece atractivo», señaló un operador. Sin embargo, agregó que aún es pronto para saber si esta mini corrida terminó. «Todo dependerá de las señales que dé el gobierno. Caputo insiste en que no va a devaluar, pero con el Banco Central comprando pocos dólares crece la incertidumbre acerca de hasta cuándo van a poder sostener este crawling peg«.
El miércoles, el Central debió vender US$ 76 millones para abastecer la demanda del mercado. Si no hay un cambio de tendencia, junio será el peor mes para el Central en lo que va de la gestión de Javier Milei. Pasó de comprar US$ 1.984 millones en mayo a tener este jueves un saldo a favor de apenas US$ 39 millones.
«Los operadores siguen con atención y preocupación la dinámica de las compras del BCRA, con junio interrumpiendo la racha de fuertes adquisiciones que venía hilando desde diciembre, a la espera de eventuales estrategias que apunten a mejorar dicha ecuación», señaló el economista Gustavo Ber.
«Ocurre que no sólo se enfrentarían a un segundo semestre donde se reduce la oferta de divisas sino que vienen en ascenso las importaciones y los pagos de energía, entre otros, lo cual podría abrir una etapa de mayores tensiones sobre las reservas«, añadió.
«Estas inquietudes se vienen reflejando en el reacomodamiento de los dólares financieros, que siguen sostenidos a partir de una mayor dolarización y así es que la brecha ya se ubica cerca del 50%, un nivel que requerirá de decisiones a corto plazo a fin de evitar que se siga expandiendo y genere no sólo eventuales distorsiones sino también un deterioro en las expectativas de los agentes económicos».
«El mercado está a la espera de definiciones hoy en Diputados acerca del paquete fiscal, ya que la inclusión de la reforma de Bienes Personales y Ganancias es clave para no comprometer la sostenibilidad fiscal, pero creemos que hay otros factores que estarían influyendo en mayor medida», marcan desde Portfolio Personal Inversiones.
«Por un lado, la mayor brecha cambiaria sumado a un muy bajo costo de apalancamiento y a la expectativa de salida del cepo incentiva a los exportadores a postergar la liquidación. El dólar financiero sólo es contenido por el flujo exportador, pero a esta tasa en pesos la liquidación se posterga y a la misma demanda (considerando las restricciones que operan para empresas e institucionales), el CCL sube», señalaron