De cara a lo que resta del año, con la expectativa de que la inflación será menor a la del primer semestre los analistas de inversión rediseñan sus carteras con estrategias que hacen foco en activos dolarizados y en CEDEARs y acciones vinculadas a la energía.
Las opciones de inversión no son iguales para todas las carteras. “En el contexto actual, en que aún vemos un largo camino hacia la normalización económica, las decisiones de inversión dependerán, como en muchos otros casos, de la conducta del inversor individual hacia el riesgo», apunta Juan Manuel Franco, Economista Jefe de Grupo SBS.
«Para perfiles conservadores, vemos valor en dolarizar carteras ante un segundo semestre en que el Banco Central es estacionalmente vendedor de divisas y en que, según los nuevos anuncios del gobierno, la autoridad monetaria esterilizará pesos vía ventas de dólares al contado con liqui», agrega.
En tanto, para perfiles más arriesgados y con confianza en que se podrá enderezar la macro, «los bonos en dólares de Argentina siguen teniendo un recorrido al alza importante en caso de darse una normalización macro. En ese sentido, vemos valor en el tramo corto de la curva, con papeles como GD29 o GD30 que realizan pagos de capital en enero 2025. Dicho esto, bonos más largos como GD35 o GD41 también podrían tener un retorno muy favorable en un escenario de macro normalizada», dice Franco.
«Para todo esto, es clave el delivery del gobierno respecto a medidas que vayan en esa dirección, reduciendo la incertidumbre inversora en un entorno pro mercado», remarca Franco.
En cuanto a Renta Fija, la recomendación de Pedro Siaba Serrate, Head of Research & Strategy de Portfolio Personal Inversiones (PPI) es volcarse a los BOPREALes Serie 3 y Serie 1-A. Se trata de los títulos emitidos por el Banco Central en la era Milei. «El Serie 3 tiene vencimiento en mayo del 2026 y actualmente rinde una TIR (tasa interna de retorno) de aproximadamente 24% en dólares. El Serie 1-A tiene la posibilidad de ser utilizado para pago de impuestos en abril 2025 (o vendido para su utilización) y muestra una TIR de 26% a dicha fecha».
Otra variante dentro de la Renta Fija es el GD35/GD38. «Es una alternativa para reinvertir bajo un escenario constructivo. El GD35 tiene el mayor retorno potencial, si la curva soberana se normaliza en línea con créditos CCC+/B. El GD38 muestra un upside levemente menor, pero quedará mejor parado en un escenario pesimista (gracias a sus cláusulas defensivas más robustas)».
En cuanto a los fondos comunes de inversión en dólares, Siaba Serrate marca que «existen diferentes alternativas para diversificar los dólares, según objetivo y perfil. Existen diferentes estrategias (riesgo argentino y LATAM). Todos disponibles en nuestro Supermercado de Fondos».
Desde Invertir on Line (IOL), el Manager de Estrategias, Maximiliano Donzelli, recomienda el ETF del S&P500. «Este fondo busca replicar el comportamiento de uno de los índices bursátiles de referencia más importantes de los Estados Unidos. El mismo, al igual que el índice que toma de referencia, se destaca por el posicionamiento en las 500 empresas más valiosas de Wall Street».
Donzelli también avala el CEDEAR de Amazon (AMZN). «Creemos que se trata de una interesante alternativa de inversión ya que es una empresa que logró diversificar sus ingresos mediante distintos negocios, como el streaming y sus servicios de cloud».
En el mismo sentido Donzelli se refiere al CEDEAR del Índice industrial Dow Jones (DIA). «Está compuesto por 30 acciones estadounidenses de primer nivel. A su vez, cuenta con más de 100 años, es el índice de mercado más antiguo de Estados Unidos, y el único conformado por empresas que reflejan una performance positiva en cuanto a la generación de ganancias durante un período de tiempo significativo».
Entre las acciones argentinas, una de las mejores alternativas que ve Donzelli es Central Puerto (CEPU), una compañía del sector energético, presente en la generación de energía eléctrica y producción y distribución de gas. «Creemos que la nueva administración deberá reacomodar los precios relativos de la economía y las tarifas acaban de registrar ajustes que le permitirán mejorar sus ingresos, que se ven impactados por los costos operativos que no están pisados, mientras que sí lo hacen sus ingresos».
Otra opción es Cresud (CRES), una compañía agrícola dedicada a la adquisición, desarrollo y operación de campos con potencial de apreciación. Además, la empresa tiene una participación de aproximadamente un 57% en IRSA, una empresa de bienes raíces líder en el país. «Los ratios de valuación la vuelven atractiva, cotizando incluso por debajo del valor de sus activos».
Donzelli agrega a Pampa Energía (PAMP). «Se trata de una de las principales compañías del panel líder del Merval. Pampa es uno de los líderes del segmento Oil & Gas. Además, participa en la generación y transmisión de energía eléctrica, por lo que constituye la compañía integrada de electricidad más grande de Argentina. Parte de sus ingresos proviene directamente en dólares de exportaciones, lo que la sitúa como una alternativa de cobertura ante la volatilidad cambiaria».
Del lado de la Renta Variable, Siaba Serrate señala que «el principal objetivo de nuestra cartera de acciones es superar el rendimiento del índice Merval a través de la selección de activos». La recomendación es aportar a YPF (20%) Vista (15%) y Transportadora Gas del Sur (15%). A esto hay que sumar Galicia (10%), Banco Macro (10%) y Pampa Energía (10%) y luego Loma Negra (7,5%), BBVA (7,5%) y Central Puerto (5%).
«Somos constructivos en acciones del Merval asociadas al sector energético, y a mediano plazo creemos que podrán dar buenos rendimientos. En este espacio destacamos a VIST, YPF, PAM, TGS y TGN. En tanto, quienes apuesten por una recuperación sostenida de la economía real podrían ver atractivo en las valuaciones actuales de acciones del sector materiales como ALUA, TXAR o LOMA”, completa Franco.