El Gobierno, a través de Sergio Massa y la directora ejecutiva de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Fernanda Raverta, anunció este miércoles la prórroga por dos años del mecanismo que permite acceder al beneficio jubilatorio sin haber completado los años de aportes o la edad mínima.
Esta política, que incluye a mujeres de 55 a 59 años y varones de 60 a 64 años que cuenten con los 30 años de aportes realizados y a partir de ahora a quienes no tengan empleo registrado al 30 de junio de 2023, había sido implementada a través del Decreto 674 en octubre de 2021 y venció el pasado 30 de septiembre.
La ANSES -precisó un comunicado- detalló que hasta el momento «más de 23 mil personas pudieron jubilarse teniendo 30 años de aportes, pero faltándoles hasta 5 años para cumplir la edad jubilatoria».
La anterior medida regía para trabajadores desocupados que acreditaran el desempleo con una fecha anterior a junio de 2021, pero, con la nueva extensión, el desempleo puede acreditarse hasta el 30 de junio de 2023, ampliando la posibilidad de acceder a esta jubilación a más de 20 mil personas en los próximos 2 años.
En este sentido, se garantiza recibir el 80 por ciento del haber jubilatorio para personas desocupadas antes de la fecha mencionada, que poseen 30 años de aportes, pero les faltan hasta 5 años de edad para jubilarse (mujeres entre 55 y 59 años; varones entre 60 y 64 años).
Al cumplir la edad jubilatoria, los titulares pasan a cobrar automáticamente la totalidad del haber.
La Jubilación Anticipada es incompatible con el trabajo en relación de dependencia o autónomo y con otros planes sociales o beneficios previsionales.
El Gobierno amplía hasta $ 1 millón los préstamos para empleados y también suben para jubilados
Más temprano, tanto el ministro de Economía y candidato a presidente y la titular del ANSES anunciaron un aumento en el monto de los créditos que ofrece el organismo de seguridad social.
El incremento será de hasta $ 600.000 para los jubilados y pensionados y de hasta $ 1 millón para trabajadores en relación de dependencia, desde el próximo lunes 6 de noviembre.
Massa dijo que aspiran a que «esta medida sirva, en muchos casos, para resolver temas de endeudamiento, de tarjeta de crédito, de mutuales, que sabemos que a veces complican la vida del trabajador».
Y agregó que los que no tienen deuda pueden usar los créditos para «avanzar de manera bancarizada, de manera digital, con la compra de bienes o con la contratación de aquellos servicios, ya sea para la familia o de turismo, que necesiten”.
El crédito a los trabajadores va a pasar de $ 400.000 a $ 600.000, a devolver en 24, 36 o 48 cuotas.
Ese dinero se deposita en la tarjeta de crédito del empleado, con lo cual no se puede utilizar en efectivo para hacer un plazo fijo, por ejemplo, ni comprar dólares.
La tasa de interés de la línea para los trabajadores es de 50%, contra más de 300% que ofrecen los bancos.
Para los jubilados y pensionados, el préstamo pasará de $ 400.000 a $ 600.000. En este caso la tasa es de 29%, aún más baja.
Con información de Télam
DB