La dinámica de ventas del Banco Central comienza a preocupar al mercado. Después de haber acumulado más de US$ 17.200 millones de diciembre a mayo, en junio cerró con ventas y se aproxima a finalizar este mes con un saldo negativo aún mayor. Este martes, el organismo se desprendió de otros US$ 64 millones, con lo que acumula un rojo de US$ 100 millones en lo que va del mes.
Un combo de factores hizo que el organismo dejase de acumular dólares para sus reservas y comenzara a vender, a un ritmo que, a ojos de muchos operadores del mercado, «resulta «preocupante». «No se logró consolidar un stock de reservas positivas antes de empezar a perder divisas casi permanentemente», advirtió un analista de la City.
El organismo acumula una racha negativa de cinco ruedas en las que sacrificó US$ 236 millones. Las reservas cayeron este martes por debajo de los US$ 27.000 y esta marca podría empeorar a partir del miércoles cuando se computen las ventas y el pago del vencimiento de la primera amortización del Bopreal 2025. el bono que el organismo creó para cancelar la deuda con los importadores y por el que debe afrontar un vencimiento de US$ 167 millones.
Justamente es el peso de la demanda importadora prácticamente «normalizada» lo que inclina la balanza al terreno negativo para el Banco Central. En PPI resaltaron que la demanda de dólares de esta semana «es récord en era Milei«, y que en los últimos días también se vieron compras de dólares en mercado oficial por parte de empresas y provincias para atender al pago de deuda. «Lo que tampoco colabora con el desempeño del BCRA es que ya haya un flujo de 100% de las importaciones accediendo al mercado oficial, por más que el acceso no sea inmediato. En otras palabras, las importaciones no se pagan al contado, pero sí hay cuatro cuotas de 25% corriendo a la vez», explicaron.
Mientras la demanda «vuela», la oferta de dólares en el mercado oficial se ve acotada por el impacto del dólar blend. El economista Martín Polo, jefe de estrategia de Cohen, explicó: «La liquidación de exportaciones viene bien, pero con el 20% que se va al mercado financiero para contener la brecha, no alcanza para ver un impacto positivo en el MLC».
A esto se suma la reciente decisión del Gobierno de «esterilizar pesos» con ventas de los dólares que compra en el MLC en el dólar financiero que, si bien sirvió para hacer que la brecha cambiaria quiebre el nivel del 40%, tiene un efecto negativo en las reservas, lo que puede a su vez hacer que el impacto en el dólar financiero resulte pasajero.
En el mercado estiman que diariamente el Central vende unos US$ 40 millones en el mercado de bonos para bajar artificialmente el precio del dólar contado con liquidación. «La brecha es el enemigo a vencer para la fase dos que inauguró el gobierno hace dos semanas. Esto se logra sacrificando dólares de las reservas, justo en un contexto en el que la cuenta corriente cambiaria se ha tornado deficitaria y las reservas netas son negativas debido a la venta de divisas en el mercado de cambios y los pagos netos de deuda», afirmó Polo.
«Para quitarle presión a los bonos, el Gobierno anunció que comprará los dólares para pagar los intereses que vencen en enero con pesos depositados en el BCRA y promete un préstamo Repo con otros bancos para afrontar los pagos de capital. Es una medida que tranquiliza a los inversores pero que no resuelve el problema de fondo: de dónde llegarán los dólares y cuál será el esquema cambiario elegido luego de la salida del cepo», cerró el economista.
SN