El tiempo de Cuaresma -la preparación a la semana de mayor significación litúrgica para los católicos, la Semana Santa- fue escogido por Cáritas Arquidiocesana de Paraná para lanzar una colecta de útiles escolares destinados no solo a niños sino también a jóvenes y adultos que están cursando su educación.
«En este tiempo de Cuaresma, pedimos un gesto cuaresmal: compartir útiles escolares usados, en condiciones o nuevos, y nosotros los ponemos a disposición de aquellas familias que lo necesitan», dice Valeria Silvero, de la Cáritas de la parroquia San José, de Crespo, a cargo del área de comunicación Cáritas Arquidiocesana de Paraná.
La Cuaresma se inició el 14 de febrero y se extiende hasta el próximo 28 de marzo, y en ese tiempo se desarrollará la colecta de útiles escolares, que ya venía haciéndose en algunos templos en forma particularizada pero que este año se extendió a toda la diócesis de Paraná.
«Es una iniciativa que se lleva adelante desde hace tiempo en distintos lugares. En Crespo, por ejemplo, desde la Cáritas San José lo venimos haciendo hace varios años. Ahora, queremos que en todas las Cáritas se realice. En este tiempo de Cuaresma, pedimos un gesto cuaresmal, que es compartir útiles escolares, usados, en condiciones o nuevos. y los ponemos a disposición para aquellas familias que los necesiten», explica.
De momento, explicó, la respuesta es dispar porque es la primera vez que se hace en toda la diócesis. De igual modo, la gente responde, dijo, ante cada convocatoria de Cáritas. «Siempre está el ánimo de colaborar, siempre hay gente con empatía con el que más necesita», aporta. «Estamos muy contentos y muy agradecidos con aquellas personas que acercaron su colaboración y animamos a los que no lo han hecho», puntualiza.
La petición alcanza a todo tipo de útiles escolares. «Siempre que se lanzan estas convocatorias pensamos en niños. Pero también hay jóvenes y adultos que recorren aulas y es importante para ellos tener sus útiles», señala. «Incluso, hay universitarios que también lo necesitan. Por eso -añade-, todo lo que recibimos lo agradecemos. Si bien nosotros hacemos esta colecta en Cuaresma, entre febrero y marzo, durante todo el año se pueden acercar colaboraciones. Todo es bien recibido».
Cada Cáritas parroquial organiza la colecta y la distribución de lo que la gente dona. «Intentamos que todos se vayan con algo. Y animamos a la gente a que sigan estudiando. Con este gesto, queremos acompañarlos», dice Valeria. «Lo material a veces puede abundar, o no. Pero hay algo que todos podemos hacer por nuestros chicos y es animarlos, acompañarlos, alentar el estudio, tener una palabra cordial para que se sientan felices en lo que están haciendo. Que lo material sea una excusa para acompañar a quienes están creciendo en la educación», subrayó.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora
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