Tras el ataque terrorista de Hamas en Israel recrudecieron las manifestaciones de antisemitismo en diferentes partes del mundo. Argentina no ha sido especialmente blanco de estos episodios, pero todas las instituciones de la colectividad judía elevaron naturalmente sus niveles de alerta y seguridad.
En este contexto, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) recomienda determinados estándares de prevención en función del peligro percibido. Y se desató un fuerte debate: cuál debería ser la mejor manera en la que los miembros de las instituciones judías -entre las que se cuentan escuelas y clubes- estén a salvo de eventuales agresiones antisemitas.
La polémica surgió porque en muchas de estas instituciones se utiliza uniformes identificatorios. Y algunos creen que su uso podría exponer a sus integrantes a posibles agresiones en la vía pública. No hay consenso al respecto, sino iniciativas diferenciadas.
La división se planteó entre los que opinan que momentáneamente sería mejor dejar de usar los uniformes y símbolos identificatorios de determinada comunidad, y los que creen, en cambio, que esa actitud no es necesaria y que incluso hasta podría ser interpretada como una concesión.
El tema es espinoso y provoca incomodidad dentro de la colectividad, tanto que una de las actitudes de los protagonistas con las que se encontró Clarín es la de preferir no manifestar públicamente este tipo de decisiones, en pos de la seguridad de los miembros de las instituciones y de que esas estrategias pasen tan inadvertidas como sea posible.
Marcos Cohen, vicepresidente de la DAIA: «No pedimos que dejen de usar los uniformes».Marcos Cohen, vicepresidente de la DAIA, se refirió al tema en diálogo con Clarín: “No pedimos a ninguna institución que dejen de utilizar los uniformes, no lo vemos necesario, pero a la vez cada institución es independiente y tiene la libertad de hacer lo que le parezca mejor”.
En cuanto a la situación actual de la seguridad de los judíos en Argentina, tras el ataque de Hamas en Israel, Cohen se mostró conforme con la respuesta del Gobierno. “Se hizo cargo de la situación”, dijo. Aunque no dejó de recordar: “Somos el país que en los ‘90 se comió dos atentados y las fronteras no están excelentemente custodiadas”.
Entre las recomendaciones de seguridad comunicadas, el directivo de la DAIA contó que “se pidió que la gente no se junte a la salida de escuelas, clubes o templos de la colectividad, circular rápido sin quedarse demasiado tiempo en las puertas. Y estar con todas las alertas en funcionamiento. Estamos en permanente contacto con las cabezas de seguridad de cada institución”.
El tema de la vestimenta, como se dijo, divide aguas. Un responsable de seguridad de Jabad Lubavitch, que prefirió mantener el anonimato, comentó a raíz de esta polémica: “El hecho de ir sin uniforme es parte de las estrategias de seguridad que no se cuentan. Son momentos para pasar desapercibidos”. Y en su interpretación fue más lejos aún: “Usar uniforme hoy sería como usar el brazalete en la Alemania nazi”.
Uno de los pocos que aceptó identificarse, en diálogo con Clarín, fue Jonathan Lemcovich, presidente de la Sociedad Hebraica Argentina. “Nosotros no le pedimos a nuestra comunidad que deje de usar indumentaria que la identifique, pero entendemos que en otras instituciones se puedan sentir más seguros implementándolo”.
La sede de Pilar de la Sociedad Hebraica Argentina.Lemcovich agregó “Seguimos los lineamientos de la DAIA, que desde el Departamento de Asistencia Comunitaria (DAC) nos asesoran desde siempre y dados los sucesos de estos días hemos redoblado todas las medidas de seguridad”. Y aseguró que “la comunidad judía está junta, dispuesta a defender su estilo de vida, su vida judía”.
Más allá de las discusiones sobre las decisiones divergentes que puedan tomarse en el actual escenario, señaló: “Estamos más cuidados que nunca con los dirigentes comunitarios alineados a las centrales. Y nos apoyamos mutuamente aún cuando podamos hacer cosas de manera diferente”.
También rescató el papel de la seguridad del Estado: “las fuerzas federales, provinciales, municipales y de CABA nos están dando un apoyo y cuidado que valoramos mucho. Con mucha comunicación. Están ocupándose que que no haya sucesos lamentables”.
Por último dijo: “No vemos que esté pasando lo mismo que en Europa, no vemos ese antisemitismo, y más allá de algunos grupos de izquierda, estamos tranquilos por cómo la opinión pública está viendo los hechos en Medio Oriente y entendiendo la naturaleza del terrorismo”.
PS