Osvaldo Franco Ariel Benítez tenía 19 años. Era de la Provincia de Buenos Aires y se encontraba en Río Negro por razones laborales. El viernes, en una jornada de calor agobiante que acarició los 35 grados de temperatura, se tiró al agua para rescatar a su amigo, que había buscado un alivio en un canal de riego. Pero la corriente lo arrastró. Desde entonces estaba desaparecido. Lo encontraron este sábado, sin vida.
Benítez estaba en Cipolletti junto con un amigo, Fernando Manuel Cabrera Martínez, de nacionalidad paraguaya y 18 años de edad. A las 16 del viernes, cuando la temperatura se ubicaba en los 34,6 grados, ambos se tiraron al agua en el canal de riego 30 lindero al barrio de ese mismo nombre.
«Se trata de un joven que se refrescaba junto a otro joven, se lanzó al canal sin saber nadar para salvarle la vida a su amigo y lamentablemente no pudo salir», le dijo Miguel Manquilef, jefe de Bomberos, al diario La Mañana.
La zona en la que se tiraron al agua tiene una cascada y una profundidad de 8 metros. Los improvisados bañistas no conocían el terreno, en una zona en la que hay una cascada de agua. Martínez logró escapar del cauce portentoso, que allí tiene una profundidad de 8 metros. Pero Benítez no pudo contrarrestar la fuerza del agua y fue arrastrado por la corriente.
Su compañero logró dar aviso a los vecinos, que ensayaron sin éxito algunas maniobras de rescate.
Durante toda la tarde del viernes, las autoridades realizaron rastrillajes en la zona para dar con el paradero del joven desaparecido. No consiguieron hacerlo.
Vecinos improvisaron un operativo para buscar al joven que se tiró al agua en un canal de Cipolletti.Con la llegada de la noche se suspendieron los trabajos oficiales de búsqueda, pero amigos y vecinos improvisaron -con cuerdas, arneses y linternas- maniobras para continuar esas labores incluso en la oscuridad.
Las autoridades retomaron las maniobras este sábado, cuando finalmente a las 10 de la mañana hallaron el cuerpo de Benítez sin vida.
El canal 30 es uno de los cursos de agua destinados al riego en la zona del noroeste rionegrino. Según recordó Defensa Civil local, está prohibido bañarse en los canales, que no están habilitados para refrescarse y, además, no tienen guardavidas. Sin embargo, en tardes calurosas como la del viernes, los vecinos desobedecen la prohibición y se meten al canal.